Ghost

jueves, 26 de noviembre de 2009

A veces me pregunto si eres un fantasma. Si es que entraste en mi vida como una marca que siempre dejará huella en mi piel. Me pregunto una y otra vez qué será de tu vida desde que no sé nada de ti. Eso me pregunto, aunque intente negarlo.
Eres como un muerto que deambula entre el infierno y el paraíso. Sé que no te has ido porque el vacío de ti en mí sigue ahí, succionado bajo mi corazón y arremetiendo contra todo lo que alguna vez fue seguridad.
Si hoy no tengo sentimientos es porque tú los destruiste. Fuiste tan desgraciado que ni siquiera los guardaste y te los llevaste contigo; todo lo contrario, los viste, los sentiste, los acariciaste como si fueran delicados, pero en el momento oportuno los pisaste y los hiciste trisa en la acera.
Más de alguna vez pensé que todo era una careta. Que me temías, y que por eso te comportabas así. Pero no, no era ni una careta ni miedo. No era más que un no te amo…
Un no te amo que destruyó tanto en mí que ni te lo imaginas.

Sí, por tu culpa temo amar. Y quizás por ti jamás vuelva a amar a nadie más.

Mataste mis sentimientos.

¿Feliz con eso?

L.E

2 comentarios:

Delilah dijo...

Love it.

te entiendo :)

Anónimo dijo...

Te creo y te admiro.
Encontraste las palabras que alguna vez sentí pero nunca salieron a conocer el mundo.
No todo es perfecto, pero muchas cosas casi lo son.
Como cuando el sol se quiere extinguir al final de la tarde con las nubes en lo alto, el viento que te invita a concentrarte y solo piensas... falta una cosa... Un sonido ( quizás el mar ).
Un poco mas....